Comunicación bidireccional y sin intermediarios, el Twitter de @FelipeCalderon

viernes, 8 de octubre de 2010

Hoy por la mañana se dio un hecho bastante interesante y novedoso desde la cuenta de Twitter del Presidente, @FelipeCalderon: hizo precisiones puntuales a dos notas que recogían sus declaraciones del día anterior y que publican hoy dos diarios de circulación nacional.

Respecto a la nota de ocho columnas de EL Universal (“FCH: veto, si diputados bajan el IVA”) @FelipeCalderon dijo: “Precisión a El Universal: yo no dije que vetaría la Ley de Ingresos si se redujera el IVA. Dije: es un atribución que habría que considerar”.

(El hecho fue recogido en diversos programas de radio y el mensaje del Presidente influyó en el medio, que minutos después modificó la cabeza de la nota en su portal de internet: FCH considerara veto si bajan el IVA).

Minutos antes, escribió sobre la nota de Milenio “Califica Calderón de éxito la guerra contra cárteles de Tijiuana”. @FelipeCalderon: “Precisión respetuosa a Milenio: no dije que ´mi política antidrogas es un éxito´. No me refiero así a la lucha por la seguridad que avanza”.

Este uso de Twitter, que ya se ha hecho por parte de otros actores políticos, tiene de fondo una clara estrategia de usar los nuevos medios como instrumento no sólo de difusión, sino de comunicación e interacción con los diversos actores de la vida política del país y también, muy importante, con los ciudadanos (Desde Twitter el Presidente Calderón responde constantemente preguntas y comentarios de los usuarios de esta red), la cual al día de hoy podría decirse que ha tenido cierto éxito, aprovechando dos características importantes: la bidireccionalidad y la posibilidad de convertirse en fuente de información, haciendo contrapeso a los medios.

El hecho es notable por diversas razones:

1. Coloca a los nuevos medios de comunicación como los espacios en los que, más que en ningún otro, se puede ejercer el derecho de réplica. El proceso tradicional para aclarar una nota publicada en los medios de comunicación no hubiera tenido el impacto que lograron estos mensajes en Twitter.

2. Modifica la forma en que un gabinete de comunicación debe afrontar el reto diario de coadyuvar en la comunicación de los actores políticos. Un usuario preguntaba si el Presidente no tiene jefe de prensa para hacer esas aclaraciones. Es obvio decir que dichas precisiones no hubieran tenido el impacto que tuvo el mensaje directo del Presidente. En ese sentido, los integrantes de un gabinete de comunicación deben integrar a sus funciones y actividades diarias el uso, manejo y análisis de los nuevos de comunicación.

3. Comprueba que se puede tener éxito, en términos de comunicación, cuando estos espacios son parte importante de una estrategia de comunicación social.

4. Da un ejemplo de uso que los políticos pueden dar a esta red y puede ayudar, en parte, a revertir la percepción de que éstos usan los espacios de internet para cuestiones más bien banales. En el fondo, da la imagen de un Presidente informado y pendiente de lo que se publica en los medios, y denota su disponibilidad para posicionar sus mensajes abierta y públicamente.

5. Marca claramente las diferencias entre la comunicación en Twitter a través de una cuenta corporativa y una cuenta personal. Desde hace más de un año la Presidencia contaba con presencia en Twitter (@Presidenciamx), con resultados más bien pobres. Sin embargo, desde la entrada del Presidente a través de su cuenta @FelipeCalderon los efectos se han revertido.

6. Reafirma que los nuevos medios de comunicación, blogs y redes sociales, son espacios de comunicación bidireccional y sin intermediarios, pues más allá de que se modificó una de las dos notas a las que hizo presiones, @FelipeCalderon logró comunicar a los lectores su mensaje directamente, al mismo tiempo que recibía comentarios y su mensaje fue repetido innumerables veces.

7. Lo novedoso de este uso por parte del Presidente influyó para que otros medios, como el radio, retomaran la precisión sobre la información publicada por los diarios, con lo que se da, obviamente, un mayor impacto.

Quizás el error que se cometió fue hacer la precisión a Milenio cuando la nota publicada era un cable de AP, generado por una entrevista al Presidente. Por ello, tal vez, el medio no modificó su nota y la difundió horas después del mensaje del Presidente con la misma cabeza en Twitter.

Posteriormente, Milenio reviró la precisión al Presidente, y pubclió una nota al respecto.

Lo destacable, también, es este intercambio entre las fuentes y los medios, lo que abona a la transparencia tanto del ejercicio público como de la actividad periodística y las desiciones editoriales de los medios de comunicación.

Federico Arreola, el "estratega" digital

miércoles, 6 de octubre de 2010

En 2005 Federico Arreola “ideó” una manera fácil y gratuita de hacerle promoción a su candidato. Compró, tomó o consiguió de alguna manera diversas bases de datos (había sido director de Milenio y otros medios) para enviar spam (correos no solicitados) a miles de cuentas de correo electrónico con propaganda política.

El hecho fue denunciado en varios blogs y portales de noticias de tecnología como ALT140, pero en muchos sentidos pasó desapercibido porque en aquellos días el uso de internet no tenía la penetración que tiene hoy, y no había redes como Twitter que permitieran la circulación de información de manera inmediata entre miles de usuarios.

El hecho había quedado un poco olvidado, hasta hoy. Federico Arreola tuvo la "ocurrencia" de publicar “su” número de celular en Twitter y logró generar una alta expectativa e interés de los usuarios de esta red, tanto de partidarios como detractores.

Lo de hoy es el sms. Captar números de celular para hacer una campaña vía mensajes de texto no es fácil. Se requieren recursos y algo de astucia y creatividad. Federico Arreola lo logró de una manera muy sencilla.

Es un hecho que los números de las llamadas y mensajes que recibió se han guardado en una base de datos para ser usada en algún momento. Lo difícil de una campaña de este tipo es recolectar a los destinatarios. En alguna forma, Arreola inauguró una manera de hacerlo, aunque con métodos bastante cuestionables.

La falta de una regulación clara al respecto le permitirá hacer uso de esa base de datos para sus fines. De más está decir el rechazo que este tipo de publicidad genera.

Algunos tuiteros lo tildaron de tonto. El señor es bastante listito.

¿Se puede influir en la agenda mediática a través de redes sociales? Segundo acto

lunes, 21 de septiembre de 2009

El 3 de septiembre pasado, @leonwradio entrevistaba al Presidente FCH en relación a su tercer informe, como parte de una serie de entrevistas que ofreció en varios medios. Hasta ahí, todo normal.

Durante la entrevista, León Krauze retomó dos preguntas desde la red social Twitter plantearon los miembros de la comunidad de este periodista, lo que hasta ese momento era inédito. (Hay que destacar que es decisión de cada medio o periodista retomar contenidos de los usuarios para complementar o no su agenda)

Pero más allá del uso que el conductor de W Radio está haciendo de redes sociales como Twitter -uso que él mismo analiza en una entrevista que le realizó @mariocampos-, lo central para este post es cómo ese uso influye en la agenda mediática y, al final, en las percepciones positivas y/o negativas de los receptores de un determinado mensaje.

LEÓN KRAUZE.-Nosotros aquí, en segunda emisión de W Radio, nos preciamos de ser una comunidad, señor presidente, y desde Twitter nos dice Roberto -¿cómo voy a creer en Calderón si es rehén de grupos de interés, de esos grupos de interés que dice que ahora quiere persuadir, como Elba Esther,- ¿el gobierno es rehén de alguien, de Elba Esther Gordillo, por ejemplo, señor presidente?

FELIPE CALDERÓN HINOJOSA.- Pues no, no somos rehén de nadie, pero tampoco es una cuestión de fe, León, yo por mi, el amigo que te escribió puede creer en lo que quiera, pero me parece que lo razonable, lo evidente es lo que tenemos que cambiar y los intereses que tenemos que tocar…

La pregunta, que venía de un ciudadano “de a pie” y no directamente del periodista, provocó una respuesta, por decir lo menos, airada del Presidente y que por sí misma se convirtió en la información central de algunas de las notas on line que retomaron esa información, incluyendo por supuesto a la misma estación de radio en su portal de internet y en todos los resumes informativos que la estación hace cada hora.

Los espacios que ocupó esa información son sin duda de gran relevancia, tomando en cuenta que ésta se generó por un usuario de internet, a través de un medio de comunicación representado por @leonwradio en esta red social. El mensaje, positivo o negativo, llegó a un número considerable de receptores, por lo que podríamos decir que el uso de la red social logró influir tato en los medios como en los usuarios.

Sin embargo, en mi opinión, no basta para concluir que como usuarios de redes sociales los ciudadanos pueden influir en la conformación de la agenda mediática o de los temas públicos, mientras sus opiniones, preguntas y cuestionamientos a las autoridades y entes públicos o privados tengan que ser retomados por un medio de comunicación tradicional para convertirse en relevantes.

Para ello, se requiere que los usuarios exijamos a instituciones, políticos y empresas contar con espacios bidireccionales de participación y sin intermediarios en los que se pueda tener un diálogo abierto y franco, y que entes públicos y privados tomen mucho más en serio a las redes sociales como canal directo de comunicación con los usuarios y ciudadanos.

¿Se puede influir en la agenda mediática a través de redes sociales? Primer acto

lunes, 7 de septiembre de 2009

En la semana que recién termina sucedieron 3 momentos muy interesantes en las redes Twiter y Facebook, que repercutieron en gran medida a la conformación de la agenda mediática.

No es casualidad que en ellos estuvieran involucrados reporteros y conductores de W Radio, estación radiofónica que a mi parecer es la más avanzada, en su conjunto, en el uso de las redes sociales y el internet como medio complementario para realizar su labor informativa.

Primer acto: El lunes 31 de agosto, W Radio daba continuidad a su cobertura sobre los dispendios y opacidad en el manejo de los recursos de la Cámara de Diputados.

En esta ocasión, en un reportaje de Lilia Saúl señalaba que el seguro de gastos médicos mayores de diputados y familiares había costado 156 millones de pesos.

Ese mismo día, en el perfil de Facebook de los diputados del PAN, aparecía un comentario de Nayeli Cortés, reportera también de W Radio, diciendo que le parecía “pura demagogia” el plan de austeridad propuesto días antes por el PAN (que propone ahorrar 250 millones) y que “mejor” renunciaran al seguro de gastos médicos para ahorrar más, buscando evidentemente posicionar la información encargada por su medio.

Ella argumentaba que se ahorraba más suprimiendo el seguro que con lo que el PAN proponía. Al final, demostrábamos con cifras que la propuesta del PAN ahorraba casi el doble de lo que se ahorraría quitándole el seguro a las supuestas 2400 personas aseguradas, y que si los 3 partidos más grandes adoptaran el mismo esquema se ahorraría 6 veces más que el monto señalado por los seguros. Aquí pueden ver los comentarios y nuestras respuestas.

Desde ese día hasta hoy, el tema del seguro de gastos médicos mayores no ha sido abordado nuevamente por este medio, aún cuando sus conductores habían dicho que ese sería un tema que “no soltarían” hasta que los diputados desaparecieran dicho seguro.

En una estrategia de comunicación tradicional, por llamarla de alguna manera, se hubiera buscado contactar al medio, pedir una entrevista para dar una explicación, o enviar un boletín o comunicado. Sin embargo, era un tema que no podía ser tratado únicamente por un partido, porque incumbe a todos los representados en el Congreso.

Además, el tema por sí mismo es difícil de posicionar (el de la austeridad), mucho más cuando las evidencias en contra son tan contundentes, por lo que los mensajes negativos tienen mucho más campo fértil.

El pequeño vacío informativo que se genera por el “abandono” de la nota, es una oportunidad para posicionar el tema a favor del grupo parlamentario. Por ello es que se han seguido usando las redes sociales para difundir el tema.

¿Buscábamos influir en la agenda mediática respondiendo a los comentarios de la reportera a través de Facebook? No.

Si bien no nos hemos planteado esa posibilidad como un objetivo relevante en el uso de las redes sociales, sí creemos que es una consecuencia de nuestra participación en ellas. Sin embargo, sería tonto pretender imponer una sola visión de las cosas, tomando en cuenta la cantidad de contenidos y de opiniones que se generan en la red.

¿Logramos influir en la agenda mediática? En parte.

Un éxito completo hubiera implicado que el medio diera la misma relevancia a los datos compartidos a su reportera a través de Facebook.

Más allá de lo sucedido particularmente en este caso, es importante destacar que el resultado es en gran parte por la política de uso de redes sociales que hemos implementado, basada en escuchar a través de las redes sociales las opiniones de los usuarios, positivas y negativas, y tratar de entrar a la conversación con los diferentes públicos.

Una reacción errónea hubiera sido, ante las críticas y los cuestionamientos, no responder o solo borrar dichos comentarios. Pero nunca pensamos en ello. Por el contrario, decidimos argumentar y entablar una comunicación bidireccional, en este caso, con los medios.

Esta posibilidad de definir la agenda, ya sea por parte de los medios o de los actores, es posible también por el incremento en el uso de las mismas para buscar fuentes de información, por parte de los primeros, y para posicionarse, por parte de los segundos.

Así que, por si alguien aún lo duda, las redes sociales son ya una sólida fuente de información y un espacio relevante para la comunicación, y llegaron para quedarse.

Próximo post: Segundo acto, usuarios de Twitter entrevistan a FCH, a través de @leonwradio

10 razones por las que los partidos fracasaron en sus campañas digitales

miércoles, 24 de junio de 2009

Aún faltan 12 días para que se lleven a cabo las elecciones de este año, en el que se renovará por completo la Cámara de Diputados, varias gubernaturas, cientos de municipios y varias legislaturas locales. Sin embargo, en mi opinión, es tiempo de hacer una lamentable afirmación: los partidos políticos fracasaron en sus campañas digitales.

Aquí las 10 razones por las que creo que eso sucedió:


1.- Porque ninguno le dio credibilidad a su campaña en la red.

  • Al principio el PAN logró colocarse como el partido que “entendía” mejor internet, aunque nunca bajo las premisas de diálogo e interacción (premisas de las web 2.0), pero logró que su campaña digital traspasara la red, generando acciones offline y cobertura de los medios tradicionales, lo que potenció sus mensajes colgados principalmente en formato de video. Lamentablemente, el caso de los spots plagiados en Nuevo León y sus consecuencias (la decisión de Youtube de bajar el canal de El Universal) dio al traste con todo eso. Ahí donde iba ganando la batalla, de pronto dejó de tener credibilidad.
  • El PRI totalmente ausente de internet: a 20 días de la elección anunciaba la creación de perfiles en redes sociales para “comunicarse” con los usuarios, sin entender que para generar una audiencia propia en estos espacios se necesita tiempo, paciencia, trabajo, cercanía y, sobre todo, credibilidad.
  • El PRD invirtió millones de pesos en la compra de espacios en los portales con mayor tráfico y generó millones de visitas a su sitio, pero no se tradujeron en un movimiento ni dentro ni fuera de la red y mucho menos en intención de voto.

2.- Porque no interactuaron con sus seguidores: ninguno estableció espacios dedicados exclusivamente para la discusión de propuestas e ideas con los usuarios de internet. Los poquísimos que abrieron espacios en redes sociales nunca interactuaron, no respondieron cuestionamientos, no gestionaron las críticas.

3.- Porque no abrieron espacios de participación: además de interactuar, requerían involucrar a los usuarios. Ninguno se atrevió a abrirse para que los ciudadanos a través de internet pudieran participar en la construcción de, por ejemplo, las agendas legislativas de los partidos. Una wiki hubiera bastado para que los internautas pudieran proponerle a sus candidatos ideas o soluciones para problemas generales o particulares de sus comunidades.

4.- Porque ninguno gestionó adecuadamente su identidad digital: nunca supieron con exactitud qué, en dónde y quiénes hablaban sobre ellos en internet. Nunca identificaron a aquellos líderes de opinión en la web que minuto a minuto forman la opinión de muchos usuarios y, por supuesto, no se comunicaron con ellos. Nunca supieron quiénes eran sus audiencias en internet (todos creyeron ir por “los jóvenes”) y al no tener claro su target nunca ubicaron con precisión los espacios en donde estos públicos están e interactúan.

5.- Porque todos tuvieron miedo a perder el control de su mensaje: Es claro que ninguno de ellos estableció un mensaje único y con fuerza que conectara con los usuarios de la red. El PAN buscó centrar la batalla en el tema del combate al narco y el PRI de ofrecer una imagen renovada. Sin embargo, fueron incapaces de identificar que los públicos en internet tienen distintos y variados temas de interés. No entendieron que internet es el lugar de las microaudiencias y que hay que comunicarse con cada una de ellas. No le dieron a los usuarios motivos ni espacios para construir sus propios mensajes y replicarlos entre sus pequeños círculos de influencia.

6.- Porque no entendieron que la reputación digital la crean los usuarios: imaginaron que creando perfiles en las distintas redes sociales todos iban a estar ahí para escuchar, comprender y festejar sus mensajes. Nada más alejado de la realidad de internet. Los contenidos los crean los usuarios, opinan, discuten, y crean la reputación de políticos y partidos. Si hay algo qué decir al respecto, primero debieron escucharlos y participar en la conversación. Aunado a ello, llegaron tarde a internet. Se montaron a la red ya comenzada la campaña “para estar a la moda” y con claras intenciones de promoción y no de apertura y participación. La identidad digital no se construye en el tiempo que dura una campaña.

7.- Porque ninguno tuvo la iniciativa de proponer una agenda de política pública digital: Algo básico para dominar la agenda en la web. ¿Cómo le creen los usuarios a un partido que está en pro del desarrollo de un país, si ni siquiera se plantea una agenda mínima en materia digital? Reducir la brecha digital, promover la competencia y propiciar tarifas más bajas y accesibles para la población, incentivos para el mercado en pro de un mejor servicio, combate a los monopolios, etcétera.

8.- Porque no transparentaron su accionar en la web: sin temor a equivocarme, puedo decir que el 95 por ciento de las cuentas y perfiles en redes sociales no son actualizadas por los candidatos. Nada nuevo y comprensible hasta cierto punto. Pero la credibilidad de un candidato (y de cualquiera) en la web depende de eso, de preocuparse, de interesarse, de interactuar, de escuchar, de estar cerca de los usuarios, volverse “uno de ellos”, de comunicarse, de saber qué se dice nosotros y gestionar esa información. Si bien es necesario apoyarse en un equipo para ello, se requiere que sean los políticos quienes directamente se encarguen de manejar su identidad digital o, por lo menos, que se involucren decididamente.

9.- Porque no formaron equipos dedicados en exclusiva a la comunicación digital: Si bien es cierto que toda comunicación debe formar parte de una sola estrategia, la falta de conocimiento y experiencia en el terreno digital requería en esta elección formar equipos con estas características que se dedicaran en exclusiva a internet. Los partidos y candidatos pensaron que llevar los mismos mensajes y contenidos a la red resolvería su campaña digital.

10.- Porque la estructura vertical de los partidos choca de frente con los principios de internet: la comunicación en internet se basa en la transparencia, en la conversación, en la apertura, en el diálogo, en la honestidad para escuchar y comunicarse, y tal como están conformados los partidos hoy en día, su estructura vertical, les impide adaptarse a una nueva forma de acercarse y convencer a sus públicos. Si algún mensaje habrán de dejar estas elecciones, deberá ser el de la necesidad de que los partidos se transformen no solo para servir mejor a la sociedad, sino para comunicarse eficaz y eficientemente con ella.

Si tienes más elementos para completar este post, por favor compártelo en los comentarios.

Nota: No quisiera dejar de mencionar el caso de Demetrio Sodi quien, con gran sentido común, informó a sus seguidores que no siempre estaría él detrás de sus cuentas en redes sociales. Aunque no es lo ideal, por lo menos se agradece la sinceridad. Caso contrario el de Ana Guevara, cuyo equipo de campaña decidió que quien estuviera detrás de su cuenta de twitter se hiciera pasar por ella, respondiendo mensajes y dando opiniones como si la propia velocista estuviera detrás de la computadora. Varias veces la cuenta fue actualizada mientras Ana estaba en alguna gira o evento, y la pulcritud en su redacción, sintaxis y ortografía es, por lo menos, sospechosa.

Wuanxi o cómo tener éxito en Social Media

martes, 19 de mayo de 2009

El Wuanxi, o Guanxi, es el arte de establecer relaciones. En China, este concepto rige la vida social de sus habitantes, así como todo lo relacionado con los negocios y, por supuesto, la política.

El Wuanxi comprende una red de relaciones y contactos entre personas que cooperan entre sí y aportan valor agregado.

Así, quienes han desarrollado una amplia red de contactos cuentan con un gran activo en favores e intercambios, que resultan determinantes para desenvolverse en su círculo social, económico y/o político.

Desarrollar un buen Wuanxi es fundamental para tener éxito, aunque cueste tiempo y dinero, ya que éste dependerá de la relación que hayamos establecido con nuestros socios, clientes, proveedores y, en general, con nuestros públicos. Sin Wuanxi, el éxito es improbable.

No está de más decir que estas relaciones no son solo a nivel empresa u organización, sino a nivel personal, y se construyen con base al respeto, la confianza, la lealtad y la confiabilidad.

Por supuesto, las relaciones y contactos no se generan justo antes del intercambio, si no que se establecen de forma gradual y se mantienen y alimentan en el tiempo.

En mi opinión, es claro que el concepto chino Wuanxi es el quid del uso de social media. El para qué usar las redes sociales, los blogs, las wikis y demás herramientas 2.0, sea cual sea al ámbito en el que te desempeñes: construir relaciones duraderas basadas en la confianza y el intercambio mutuo.

En particular, el concepto de relaciones constructivas y recíprocas que significa el Wuanxi aplica en redes sociales como Twitter, en donde los followers (contactos) son lo más importante, y que se consiguen con base en la reciprocidad y la confiabilidad.

Si las empresas y organizaciones sociales y políticas (sobre todo aquellas que gozan de una mala reputación offline) incursionan en la comunicación 2.0 bajo este concepto, es casi seguro que se encontrarán con el éxito a la vuelta de la esquina.

Fuente: 36 estrategias chinas.

¿Cómo establecer los objetivos de tu campaña electoral online?

lunes, 18 de mayo de 2009

Con un diagnóstico claro de la elección, entonces podemos enfocarnos en establecer nuestros objetivos para la campaña digital.

Decíamos en el post anterior que muy probablemente los objetivos de la campaña digital serían distintos a la campaña tradicional, pero, a fin de cuentas, parte de una misma estrategia.

Para establecerlos, hay que conocer los modelos básicos de comunicación y publicidad online, así sabremos qué obtenemos con cada uno de ellos: a la conclusión que lleguemos sobre cuáles son nuestros objetivos de la campaña online dependerá también de las herramientas que tengamos a la mano.

Creo que es necesario hablar de dos “espacios” (si se me permite la expresión) dentro de internet: las páginas y sitios de influencia (portales como yahoo, prodigy y, periódicos online, básicamente) y herramientas 2.0 (blogs, redes sociales, etcétera). Además, existe otro entorno que es el correo electrónico y que abordaré en otro post.

El tipo de mensajes que podemos difundir en los portales a través de banners y sus variantes, nos permiten lograr cierto tipo de objetivos, principalmente visibilidad en la red y visitas al sitio web que hayamos elegido para recibirlas (posicionamiento, recordación de la marca).

El costo de esta campaña es, en mi opinión, el más alto y menos efectivo, porque depende de dos factores importantes: el grado de rechazo de los usuarios a este tipo de publicidad (ver Ceguera a las banners) y, sobre todo, a los negativos de los candidatos y partidos. Esta publicidad se enfrenta al rechazo visual de los usuarios en cuanto a la identificación partidista, mucho más cuando se trata de formatos publicitarios online considerados invasivos.

También hay que tomar en cuenta el llamado ratio de conversión, que básicamente significa si el usuario llevó a cabo una acción determinada en nuestro sitio con lo cual consideramos que su visita ha sido exitosa: ¿Se registró dejando sus datos? ¿Vio nuestro video? ¿Comentó en nuestro blog? Si solo medimos las visitas al sitio puede que no estemos logrando los objetivos deseados. Por tanto, si no establecemos qué esperamos de las visitas que generemos a través de nuestra publicidad, nuestro retorno de inversión sería prácticamente nulo.

La inversión en este tipo de publicidad se mide en varios rangos. Por orden de relación costo/beneficio: Costo por Mil Impresiones, Costo por Clic, Costo por captar clientes (cuando el usuario realiza determinada acción) y costo por adquisición, que en este caso sería muy similar al costo por captar clientes. Si queremos entonces posicionar el nombre del candidato o partido en la red buscando recordación de marca, podemos hacer un mix con este tipo de campañas.

En cambio, si nuestro objetivo es comunicarnos con usuarios de calidad, que reciban de manera positiva nuestro mensaje y lo retransmitan por sí mismos, además impactar en los medios tradicionales, lo mejor será acercarnos a las redes sociales, blogs y demás herramientas de la web 2.0.

Esto para nada resulta fácil, porque dichas acciones requieren no solo de tiempo y esfuerzo, sino de adentrarse en ellas, conocer el lenguaje y las buenas prácticas para que nuestra participación no genere el rechazo de los usuarios.

Lamentablemente, aún no hay muchas agencias en México que se dediquen a llevar a buen puerto este tipo de estrategias, por lo que aquí dependemos casi única y exclusivamente a la actividad de nuestro equipo de campaña. Por ello es muy importante que el objetivo de nuestra incursión en las redes sociales esté bien definido, porque en caso contrario lo que provocaremos serán acciones en sentido contrario al esperado.

Pero lo más importante en las redes sociales es estar dispuestos a aplicar los valores 2.0 de los que ya hemos hablado: escuchar, participar, compartir información y CONVERSAR. Esto nos permitirá lograr uno de nuestros grandes objetivos, que es el de construir alrededor de nuestra marca una comunidad de usuarios, establecer conversaciones positivas con ellos y delinear acciones de comunicación efectivas con los distintos targets.

Con ello podreor ir creando poco a poco una comunidad de usuarios con los cuales comunicarnos de manera transparente y que serán mucho más receptivos a nuestro mensaje.

Otro gran objetivo del uso de herramientas 2.0 sería ir creando esta comunidad a través de la generación de bases de datos confiables, tanto de correos electrónicos como de celulares, de una manera natural y no intrusiva.

No ahondaremos ahora en las acciones a llevar a cabo tanto en publicidad online como en acciones 2.0, porque cada una de ellas merecería la pena un post; la intención ahora es establecer claridad sobre la importancia de tener objetivos bien definidos que, con base a la investigación que llevamos a cabo anteriormente, nos permitan establecer las acciones a emprender.

En conclusión, para llevar a cabo una comunicación digital efectiva deberemos establecer claramente nuestros objetivos tanto de campaña online como de la incursión en redes sociales, lo que nos permitirá además llevar un seguimiento y medición de los resultados.